domingo, 4 de octubre de 2009




EL ARTE Y LA MEMORIA HISTÓRICA

Si hacemos un poco de historia evolutiva del arte y concretamente lo que personalmente me atañe, la escultura, vemos el protagonismo que ha tenido este arte plástico con los acontecimientos acaecidos. Por ejemplo, la decadencia de la Imagineria escultórica, se produjo a finales del S.XVIII y no volvió a resurgir tímidamente hasta después de nuestra tristemente famosa Guerra Civil del 36; los escultores, que quedaban en España, fueran de la ideología que fuera, se "montaron en el carro" de reconstruir y esculpir numerosa Imaginería religiosa que fue "vilmente destruida" por las ordas "rojas". Fue un respiro económico para todos aquellos artistas que como casi toda la nación, se encontraban en precaria situación de supervivencia. Pasado este "bum" de desagravio religioso, volvió a estancarse la imaginería, mientras que la escultura laica pululaba entre corrientes sectoriales donde como siempre, "el más listo hacía relojes" y nadaba al son de la "movida" provechosa ya que lo importante era y sigue siendo, el "cocido" diario que llevarse a la boca... Hubo escultores más afines a la "Gloriosa Cruzada" que sacaron mayor provecho de su hacer artístico,llevando a cabo obras faraónicas que deleitaron a aquella España sumida en una oscura ceguera dictatorial. Muestro una conocida imagen de una de estas manifestaciones sensacionalistas
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Ahora en los tiempos que corren de rememorar la famosa "Memoria Histórica" y sin entrar en polémicas sobre su desarrollo, los escultores de nuevo salimos a la palestra, naciendo obras conmemorativas de este tema, como setas en otoño. Es decir que el "filón" de homenajear a unas víctimas olvidadas de una no menos manida y vergonzosa Guerra Civil ha supuesto un respiro para los hacedores de escultura..., Otra nueva corriente a considerar.
Como personalmente no iba ser menos, también he caido gustoso en este movimiento creativo y tengo mi proyecto realizado en espera de la burocracia administrativa y también de los permisos y beneplácitos ideológicos de las autoridades retrógadas del lugar de destino.

Mi grupo escultórico es amargo, trágico y desgarrado como requiere la ocasión y el motivo homenajeado. Quizás demasiado trágico y amargo para algunas mentes aún cerradas en un pasado lleno de falsas glorias y cruzadas. La única ilusión artística que me queda es ver hecho realidad este proyecto escultórico en una ciudad hermética y "tradicional" donde, como en otras muchas, corrió mucha sangre inocente. Publico unas imágenes testimoniales de este futuro monumento de considerable tamaño.